Con estos días tan fríos que estamos pasando, la cocina se convierte en nuestro aliado y las cremas, potajes y platos calientes son los más apetecibles, pero si pensamos en dulces, nada como un buen tazón de café o chocolate caliente y unos churros recién hechos.

La receta de los churros no tiene ningún ingrediente extraño: harina, agua, sal y levadura; ingredientes muy sencillos que seguro tenéis en la despensa, esto hace que estén presentes en todas las ciudades españolas y que además, se haya exportado a numerosos países, hasta los japoneses han caído en la tentación y ya se sirven churros en el centro de Tokio.

Con unos ingredientes tan sencillos sólo hay que tener en cuenta varios puntos para unos churros perfectos: que la masa esté bien mezclada y homogénea, así no tendremos grumos; que el aceite esté bien caliente, el impacto del calor hará que la masa suba y no nos queden apelmazados; no olvidar el punto de sal, mis primeros churros quedaron sosos; y dejarlos reposar un par de minutos en un papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Aunque habitualmente se toman con chocolate caliente, a mí me gusta tomarlos cubiertos con un poco de azúcar y canela y acompañados de un café o una infusión, son deliciosos recién hechos.

Receta de churros caseros

Churros caseros

1 taza de harina

1 taza de agua

1/2 cdta de sal

1/2 cdta de levadura

1 pizca de vainilla en polvo (opcional)

100 g de azúcar

2 cdtas. de canela

Aceite de oliva para freir

Mezclar 100 g de azúcar con 2 cucharaditas de canela.

Colocar el agua en un cazo y poner a fuego medio. Mientras mezclamos la harina, la sal, la levadura y la vainilla.

Cuando el agua rompa a hervir, retiramos del fuego y echamos de golpe la harina. Removemos con ayuda de una cuchara de madera hasta que tengamos una masa lisa y brillante. Dejamos que temple.

Ponemos el aceite en una sartén a fuego medio-alto.

Rellenamos la churrera con la masa. Echad una bolita de masa en la sartén para comprobar si está suficientemente caliente, si se hincha un poco la masa y se dora en unos segundos está perfecta.

Presionamos la churrera para que empiece a salir la masa por la boquilla, ahora podréis echarla directamente sobre el aceite caliente e ir cortando con unas tijeras en la medida que queramos, pero para esto es mejor que estéis dos personas, o bien ir echando la masa en papel de horno y cortarlos todos con la misma medida. Una vez cortados, los podréis ir echando poco a poco al aceite caliente.

Dorar por ambos lados y sacar. Dejarlos reposar sobre un plato con papel, así quitaréis el exceso de aceite. Cuando estén templados espolvorearlo con la mezcla de azúcar y canela, podéis omitir este último paso.

Algunos apuntes

*Si preferís tener cantidades exactas en la receta, tendréis que echar el doble de agua que de harina, en este caso, 200 g de harina por 400 ml de agua.

*La cantidad de harina y agua puede variar según la capacidad de absorción de vuestra harina, es posible que necesitéis un poquito más que la que os indico.

*Si aún no tenéis churrera es un buen momento para haceros con una, podéis comprar esta en EnJuliana por 10,25 euros. También os valdrá para hacer galletas de mantequilla clásicas.

*Podéis usar una máquina de galletas como esta (es la que he usado yo) aunque no os salgan con la forma tradicional, tenéis una boquilla doble que os irá a la perfección.

*Con esta receta salen unos 40 churros de tamaño mediano.

*El menaje de mesa nórdico de las fotos podéis encontrarlo en My Pretty Table, no olvidéis suscribiros a la newsletter para obtener un 10% de descuento.